Esta segunda versión del protocolo establece el abordaje multidisciplinario de los cadáveres de casos médico legales, ante la alerta epidemiológica de COVID–19 en Panamá, tanto en el lugar del hecho como en las morgues judiciales, que permita al MP y al IMELCF, el manejo, transporte, certificación de la muerte y disposición de los cadáveres, acorde con las recomendaciones nacionales e internacionales pertinentes, con el propósito de cumplir con las disposiciones legales vigentes, pero también considerando los riesgos inherentes a la exposición, directa o indirecta, de los funcionarios al COVID-19.
El documento aplica para los médicos forenses, asistentes de médicos forenses, personal de Criminalística del IMELCF, funcionarios del MP y otros intervinientes o participantes en las diligencias de levantamiento de cadáver y práctica de las necropsias de personas fallecidas con sospecha, probabilidad o confirmación por infección por COVID-19 con implicaciones médico legales.
La reunión contó con la participación de Vera Varela, subdirectora de Medicina Forense; Lineth Saldaña, jefa de la Sección de Patología Forense; Nidia de Lora, coordinadora de la Sección de Clínica Médico Legal; José Mon, jefe de la Unidad de Odontología Forense y un grupo de médicos forenses. Por la Subdirección de Criminalística, Cintia Linares, subdirectora; Francisco Wellington, supervisor de Áreas Periciales; Irvin Castro, jefe de la Sección de Criminalística de Campo y Lizbeth González, supervisora de Laboratorios.
Por el Ministerio Público intervinieron Edwards Acevedo, de la Fiscalía Superior de Litigación; Julio Villarreal, Azael Samaniego, Francisco Marco Hermoso, Sonia Almengor y Marco Lorenzo de la Fiscalía Superior de Atención Primaria del área metropolitana; Rafael Baloyes y Humberto López de la Fiscalía Superior de Homicidios y Femicidios del área metropolitana.
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